En Oregon, Estados Unidos, los habitantes han sido forzados a abandonar sus hogares y ponerse a salvo en refugios o en hoteles por causa de los incendios que afectan ese estado. .
Los bomberos priorizan la vida mientras combaten las llamas que han incendiado a más 364.000 hectáreas en el estado.
En California y Washington también intentan contener las llamas que avanzan y dejan pueblos y bosques destruidos.
Al menos quince personas han perdido la vida en las emergencias que ya completan varios días
.