El apoyo de los allegados para quienes sufren este padecimiento es importante, aunque no están exentos de experimentar sentimientos encontrados.
A propósito del Día Mundial del Párkinson es importante aclarar que una persona con este padecimiento no debe solo recibir un adecuado tratamiento médico, sino que debe contar con apoyo indispensable.
Es el caso de Sandra Rodríguez, una mujer que lleva 10 años conviviendo con este padecimiento y que revela que “a nadie le contaba que tenía párkinson, me daba como vergüenza. Ya hoy en día todo el mundo lo sabe y pues lo asumo y lo acepto”.
Este cambio de mentalidad ha sido gracias a su familia, entre quienes se cuenta su hija Andrea Lizcano. Ella afirma que notar el deterioro de la salud de su mamá “era emocionalmente duro”.
Publicidad
Sin embargo, hubo unión alrededor de esta situación, lo que ha sido positivo tanto para la paciente como para quienes están pendientes: “hemos sido muy fuertes, hemos estado muy unidos como familia y pues pendientes todos de todos. Éramos más independientes antes de la enfermedad de mi mamá”, resume Andrea.