En Cartagena, donde se pagó $40.000 por pechuga de pollo, niños aguantan hambre en clases

“Hay muchos que entran sin desayunar ni almorzar, porque los padres de familia no tienen para darles”, dijo indignada una mamá.

La delicada situación se debe a que hace más de un mes se venció el contrato para el suministro de alimentos en colegios públicos de la Heroica.

Una comerciante, ubicada en las afueras de un plantel donde los menores se ven afectados, dijo que las raciones “no sé las están dando. Ellos con los que les dan de su merienda parten, comen un poquito y guardan para una gaseosa o su merienda en los quioscos”.

“Es una lástima que los niños de los sectores menos favorecidos de Cartagena sean quienes estén sufriendo las consecuencias de esta descomposición que hay en la contratación”, lamentó Humberto Mendoza, tesorero del sindicato de educadores de la ciudad.

Según el dirigente, la falta de alimentos escolares en este final de año se debe a recortes del presupuesto hechos desde el Gobierno Nacional.

Este martes, la Contraloría señaló al exalcalde Manuel Vicente Duque de asignar a dedo un contrato para suministro de refrigerios escolares por $23.000 millones.

Por esta razón, además de sobrecostos en pechugas, la ciudad terminó pagando $39 millones de pesos por 2.800 kilos de canela y se compraron panes por $2 millones que no fueron entregados a la totalidad de planteles.

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