Productos como la cebolla, el cilantro y las frutas que se vendían en el bloque 27 de la Central Mayorista, ubicada en Itagüí, hoy se compran en la calle.
Los comerciantes afectados por el incendio tuvieron que improvisar nuevos puestos de trabajo.
“Estamos es tirados es del todo (sin dinero), esperando a ver qué soluciones nos dan. Nos tocó rechazar más de una mercancía, por decir algo, uno compraba 20 kilos de fresa y hoy tocó recibir la mitad, si se compraban 100 kilos de tomate, tocó recibir por ahí 40”, contó uno de los afectados.
Tras la emergencia no solo resultaron afectados los comerciantes. Hay por lo menos otras tres mil personas a la deriva.
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José Ángel González Gaviria, un carretillero afectado por el incendio, manifestó que “el bloque Las Malvinas quedó destruido, entonces más de uno que nos sustentábamos de ahí carreteando, cotiando (cargando) y entrándoles la mercancía a clientes y sacando mercantiles a la autopista. A unos se nos quemaron las carretas para nuestro medio de trabajo y como no hubo trabajo, estamos por aquí mirando a ver dónde nos van a ubicar o qué vamos a hacer por acá”.
Las autoridades evalúan si será necesario demoler ese bloque, el número 27.
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José Nicolás Ríos Correa, secretario de servicios y suministros de la Alcaldía de Medellín, contó que “la estructura, una construcción bastante antigua, estuvo sometida al fuego durante 10 horas. Vamos a buscar a ver cuáles son esas alternativas de reubicación de ellos y que ellos busquen unos lugares dentro de la misma plaza donde se puedan ubicar para seguir atendiendo y vendiendo sus productos; la idea es acompañarlos lo que más podamos”.
Las alcaldía de Medelín e Itagüí buscan salidas a la problemática.
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