Los residentes de varios barrios del suroriente de Cali manifiestan su preocupación debido a que, aseguran, habitantes de la calle se han apoderado del separador ubicado en las calles 25 y 26 para el consumo y venta de droga.
La comunidad señala que día a día son más las personas que llegan a esta zona, lo que incluso ha generado riñas, que han dejado varios muertos y heridos.
Los afectados sostienen que los vehículos que se movilizan por el sector son atacados a piedra, para intentar robarles sus pertenencias. Solicitan a las autoridades realizar controles con acciones, no solo judiciales y policiales, sino también de trabajo social con estos habitantes de la calle.