Ocho años de trabajo y dedicación familiar, reducidos a cenizas. En menos de tres horas las llamas consumieron el esfuerzo de propietarios y empleados, que lo perdieron todo.
“En este momento no tenemos trabajo. Estábamos todos laborando en esta empresa y ahora ya nos toca empezar a buscar trabajo”, asegura John Vergel, damnificado por el incendio.
Hoy como cualquier lunes, a las 6:30 de la mañana los empleados del primer turno de la empresa de espumas se disponían a laborar, pero el panorama era distinto. Según el dueño de la fábrica un globo fue el culpable de la emergencia.
“Cayó un globo, esos son los indicios que hay. Esto es un hecho que es muy frecuente en el área metropolitana, todos los años aquí se queman dos o tres empresas y aquí no pasa nada”, dice Honorio Tabares, propietario afectado.
Alrededor de 120 personas no saben nada de su futuro; jóvenes y adultos hoy engrosan la lista de desempleados.
“Muy tristes, muy afectados, tanto los propietarios como los empleados, pues muchas familias, no solamente son 120 empleados, son 120 familias”, agregó Vergel.
Por ahora, la aseguradora realiza el balance de pérdidas y analiza las cláusulas de responsabilidad para la indemnización.
Updated: enero 05, 2015 01:44 p. m.