Entre las medidas está revisar los esquemas de seguridad, viajes en clase económica para los funcionarios y reducir el uso de los vehículos oficiales.
El Gobierno Nacional está buscando dinero de donde sea para poder cubrir el hueco fiscal de 14 billones de pesos. Primero, presentó una controvertida ley de financiamiento y, ahora, ha anunciado un plan de austeridad gubernamental para ahorrar la mayor cantidad de recursos posible.
“En el año 2019 buscaremos ahorros por más de 1,2 millones de pesos. Espero que en 2020 se ahorre 3 billones de pesos y en 2021 lleguemos entre 3 y 4 billones de pesos”, aseguró el presidente durante el anuncio de las directrices de austeridad.
Entre las indicaciones dadas, una de las más importantes es la reducción de los esquemas de seguridad de los servidores públicos, incluido el del mandatario.
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De igual manera, se anunció que los viajes de los funcionarios tendrán que realizarse en clase económica, solo cuando el viaje supere las 8 de horas de vuelo se analizará la posibilidad de que se haga en clase de ejecutiva.
En materia de transporte, también se estableció que los vehículos oficiales se usarán de lunes a viernes sin restricción y los fines de semana se verá condicionado su utilización. Igualmente, serán los propios funcionarios los que se hagan cargo de las multas recibidas por los carros de su flota.
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El ajuste al cinturón contempla un ahorro en el consumo de agua y electricidad de las instituciones gubernamentales, una racionalización de la publicidad oficial, prohibir los regalos corporativos y fiestas y hasta menguar los gastos en refrigerios.
Además de los recortes, la directiva presidencial prohibió la modificación del personal en las instituciones oficiales, a menos de que se para reducirlo, y pidió que las contrataciones por prestación de servicios sean eliminas progresivamente.
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