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Desde el pasado 8 de enero, cuando el Barcelona se impuso por 0-1, nadie ha ganado en su estadio al Atlético de Madrid, reencontrado con su fortaleza del Metropolitano con seis victorias seguidas como local y siete en los últimos ocho partidos, a la espera este miércoles del Cádiz entre el asalto al segundo puesto que se propone el conjunto rojiblanco y la permanencia del equipo amarillo, todavía con margen.
Son cuatro puntos de ventaja del Cádiz sobre el descenso al inicio de la cuenta atrás de seis jornadas para que concluya una competición a la que el grupo de Diego Simeone ha llegado tan tarde que ni siquiera su imponente momento actual, con ocho victorias en sus últimos nueve compromisos de Liga y con una sola derrota en sus 16 encuentros recientes, lo bastan aún para estar entre los dos primeros de la tabla. Necesita más.
Su nivel también lo ha reconciliado con el mejor ambiente del Metropolitano. Ya no se escuchan desde apenas ningún sector pitos a Diego Simeone, que gana por mayoría en el respaldo ruidoso de la grada. Ni se respira el ambiente enrarecido de otros tiempos en este curso. Parece que ni sucedieron, guardados ya en el olvido porque los resultados son incontestables como local, también el juego: seis victorias y 16 goles a favor. Irrebatible.
Lo han sufrido el Athletic (1-0), el Sevilla (6-1), el Valencia (3-0), el Betis (1-0), el Almería (2-1) y el Mallorca (3-1), al que debió remontar un 0-1. Desde que fue por última vez campeón de Liga, en 2020-21, no era tan fiable en su territorio como ahora, cuando también enlazó seis victorias. Su récord en este estadio está en diez, en 2018.
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Ni siquiera la baja de Jan Oblak, fuera de sus dos últimos compromisos por una contractura cervical que también lo pone en duda para este miércoles, es ya un contratiempo estresante para el Atlético. Ni las ausencias de Marcos Llorente, Stefan Savic o Reinildo Mandava, que conformarían todos parte del once tipo de Diego Simeone. Los tres están fuera de competición en la actualidad y previsiblemente hasta el final de la temporada.
Ni los goles en contra, seis en los últimos cinco encuentros, derriban al Atlético como antes del Mundial 2022. En todos esos duelos que recibió algún tanto, sólo cayó con el Barcelona, por 1-0 en el Camp Nou. El resto, los ganó. Porque, a la vez, expresa una pegada que tampoco tenía hace meses. Sus cinco goles al Valladolid son una demostración. Igual que genera más ocasiones que antes, todo canalizado por Griezmann, formidable.
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Y tiene un once más que hecho, que sólo altera cuando sufre alguna baja. Como por ejemplo ahora, con Ivo Grbic como reemplazo de Oblak en la portería. O con Thomas Lemar como recambio de Marcos Llorente. O con Axel Witsel como sustituto de Savic. El resto son los de siempre en las últimas semanas: Nahuel Molina, José María Giménez, Mario Hermoso, Yannick Carrasco, Rodrigo de Paul, Koke Resurrección, Antoine Griezmann...
Y Álvaro Morata, Memphis Depay o Ángel Correa, porque la posición más ofensiva es la que más varía en la mente del técnico, que ha apostado los dos últimos compromisos por el goleador español, autor de dos tantos en los dos duelos más recientes, pero ya dispone del delantero neerlandés, que batió la portería del Valladolid en su regreso a la competición desde el banquillo tras un mes de baja, y maneja siempre el recurso del argentino.
En su reencuentro con el árbitro César Soto Grado, cuya actuación en el derbi de la Copa del Rey de esta campaña ante el Real Madrid desató el comunicado de Miguel Ángel Gil Marín, consejero delegado del club, sobre la "presión" de la entidad blanca hacia los colegiados, con la crítica a su decisión de no expulsar a Dani Ceballos con 0-1, el Atlético tendrá enfrente al Cádiz, henchido de moral tras el 2-1 al Valencia.
Quiere dar la sorpresa en un feudo en el que no ha podido vencer aún en su singladura en Primera División. Nunca ha ganado en el terreno del Atlético de Madrid a lo largo de sus catorce enfrentamientos, con trece triunfos rojiblancos y un único empate, 0-0 el 5 de mayo de 1991 en el Vicente Calderón.
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Los pupilos de Sergio González confían en dar un zarpazo que les asiente con mayor fortaleza en la parte de la clasificación donde se encuentran, fuera de los puestos de descenso, de los que están alejados en cuatro puntos.
Es probable que el técnico catalán haga rotaciones debido a la carga de partidos que acumula el equipo con estas jornadas intersemanales, pero además también lo hará por obligación, ya que visitará al Atlético de Madrid con varias ausencias de jugadores titulares debido a las sanciones.
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En el último partido ante el Valencia vieron su quinta tarjeta amarilla el defensa central Luis Hernández, el centrocampista Federico San Emeterio y el delantero Rubén Sobrino. Todos ellos, titulares en el encuentro anterior, no estarán frente al conjunto de Simeone.
Alineaciones probables:
Atlético de Madrid: Grbic; Molina, Witsel, Giménez, Hermoso, Carrasco; De Paul, Koke, Lemar; Griezmann, Morata o Memphis.
Cádiz: Ledesma; Parra, Meré, Momo, Espino; Alcaraz, Escalante, Alejo, Bongonda; Guardiola, Ramos.
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