Manatí antillano vive arrinconado en lagunas y ciénagas donde la contaminación lo tiene amenazado

Hace apenas un mes murió un manatí antillano, una especie emblemática que durante años habitó el Magdalena Medio, pero que fue obligada a desplazarse por la acción del hombre.

Arrinconado en lagunas y ciénagas, así vive ahora el manatí antillano, una especie que otrora habitó en todo el Magdalena Medio y “que se ha demostrado es que por la presión antrópica que ha recibido el río, estos animales han migrado de alguna manera a aguas más lentas, a cuerpos de agua como humedales y ciénagas que están asociadas al río Magdalena”, afirma James Osorio, director de la fundación Cabildo Verde.

No obstante, este no es un lugar seguro para ellos ya que se está deteriorando por aguas residuales sin tratamiento, ganadería extensiva, ampliación de la frontera agrícola, carreteras, represas y una industria que lleva años en la zona: la actividad petrolera.

Luis Alberto González, fiscal de Asojuntas del corregimiento El Llanito, en Barrancabermeja, Santander, dice que “hay un caño que conecta directamente con la refinería y es donde nos botan todos esos químicos, como hidrocarburo y demás que ellos dicen que no y efectivamente eso sí ha venido desplazando mucho la fauna”.

Leonardo Granados, quien lidera la fundación San Silvestre Green, sostiene que “en los últimos cuatro años ya tenemos más de 9 muertes de manatí antillano, la última fue el 5 de marzo de este año, donde murieron babillas, manatí, peces y estamos denunciando precisamente los impactos ambientales generados por la industria en esta área de Campo Llanito”.

“Lamentablemente estamos observando una falla estructural por parte de Ecopetrol en la forma como han pretendido hacer las supuestas biorremediaciones. Lo que estamos observando es que están destruyendo los ecosistemas, están tapando la contaminación, están rellenando y sedimentando humedales, lo cual viola el plan de conservación del manatí antillano”, recalcó Granados.

Esta especie no es la única afectada, también otros animales, así como campesinos que viven en la zona.

Si las cosas no cambian, el manatí antillano enfrentará su desaparición y no servirá el ecosistema acuífero porque sus aguas están contaminadas.

¿Qué dice Ecopetrol frente al desplazamiento del manatí antillano?

La petrolera niega que existan tales vertimientos. Jimena Contreras, profesional de la gerencia ambiental de la regional central, asegura que la actividad es limpia.

Ecopetrol no tiene vertimientos en estas fuentes hídricas de las ciénagas San Silvestre y ciénaga El Llanito, y tampoco ha manejado u operado planes de remediación en estos cuerpos de agua. En Ecopetrol implementamos la estrategia de cero vertimientos, permitiendo la reutilización de las aguas industriales generadas en los mismos procesos”, afirmó.

Respecto a la denuncia de la fundación San Silvestre Green de impactos ambientales en sitios como Cardales, Los Pinos y La Tenaza tampoco reconocen responsabilidad porque consideran que “no existen humedales. Ahora bien, frente a lo consultado, que cómo atendemos nosotros como Ecopetrol los impactos ambientales no resueltos, desarrollamos análisis de riesgo previos con el fin de seleccionar la técnica más apropiada para el proceso de recuperación”.

Asimismo, Jimena Contreras dijo que frente a la amenaza que corre el manatí antillano, la compañía implementó “acciones enfocadas a la elaboración de esos manuales de protección y conservación de esta especie, monitoreos participativos, incluso con la comunidad de la región a los complejos cenagosos”.

Pero si Ecopetrol no contamina las aguas y su actividad es 100% limpia, entonces ¿de dónde provienen las trazas de hidrocarburo que flotan en el agua?

"