'Un porro por una vacuna': militantes de la legalización de la marihuana causaron polémica este martes en Manhattan al ofrecer un porro a las personas que recibieron al menos la primera dosis de la vacuna contra el COVID-19
La idea era celebrar la legalización del cannabis recreativo en el estado de Nueva York y apoyar la campaña de vacunación este 20 de abril ("4/20" en inglés, cifras que se convirtieron en un código de la marihuana).
"Es la primera vez que podemos sentarnos y distribuir porros legalmente", explicó Michael O'Malley, uno de los organizadores, al distribuir lo que con anticipación habían preparado algunos voluntarios.
"Apoyamos el esfuerzo de vacunación del gobierno federal e intentamos también que legalicen el cannabis a nivel federal", dijo.
Desde el inicio de la distribución, que fue hacia las once de la mañana y se extendió durante unas cinco horas, se formó una cola de 50 personas, jóvenes y no tanto, en la plaza de Union Square, a pasos del Greenwich Village.
La espera fue corta: una decena de minutos al sol, suficiente para mostrar el carné de vacunación en papel o en el teléfono, y de dar la dirección de correo electrónico.
Sarah Overholt, de 38 años, salió con dos cigarros de cannabis tras mostrar su carné de vacunación y el de su madre, de 70 años.
En la primera media hora se distribuyeron entre 150 y 200 porros, de un total de 1.500 preparados por los voluntarios.
Diversas marcas estadounidenses, sobre todo en la industria de la alimentación, lanzaron promociones ligadas a la vacuna en las últimas semanas: buñuelos, perros calientes o cervezas son ofrecidos en diversos lugares del país a las personas que prueben haberse vacunado contra el COVID-19.