A raíz de la escasez de alimentos, venezolanos en Zulia han tenido que diseñar estrategias para enfrentar la crisis.
Es el caso de esta bodega en el centro de Maracaibo, donde se vende comida por porciones debido a la baja capacidad adquisitiva, que impide a los habitantes del sector hacer mercados semanales.
“La gente está comprando por la mitad porque es lo único que alcanza”, afirmo Richard Gil, uno de los vendedores por porción.
En las circunstancias actuales comprar un kilo de arroz le costaría a un venezolano dos días de trabajo. Por eso, adquirir un paquete completo es un lujo en el vecino país.
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Así, el dinero obtenido por los venezolanos es en su mayoría para comer, gastos extras están restringidos.