El arzobispo de Cali, monseñor Darío de Jesús Monsalve, volvió a ser noticia por sus fuertes y crudas declaraciones, esta vez al asegurar que el Gobierno nacional estaba enfocado en desmontar el acuerdo con las FARC y que se sentía un espíritu de venganza contra Juan Manuel Santos.
"Un espíritu de venganza contra el pueblo que acompañó estos procesos. Una venganza genocida para desvertebrar y desmembrar completamente la sociedad, las organizaciones sociales y la democracia", anotó el religioso.
De igual forma, señaló que en lo que tiene que ver con el proceso de paz con el ELN “experimentó una gran frustración y una enorme incertidumbre en relación con el inmediato futuro de estos procesos".
"Y aún al mediano y largo plazo, porque los procesos que están, que subyacen a esta pandemia, puedan echar por tierra, completamente", dijo el jerarca de los caleños.
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El religioso se pronunció en la quinta asamblea virtual de la Comisión Étnica para la Paz y Defensa de los Derechos Territoriales.
Entre tanto, la Nunciatura Apostólica desautorizó, mediante un comunicado, las declaraciones del religioso.
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“La Nunciatura Apostólica en Colombia se precisa de aclarar a la opinión pública que dicha calificación de gestión gubernamental no corresponde a la visión que la Santa Sede tiene de la compleja situación en que versan en este momento”, dijo.
La sede diplomática del papa precisó que dicha situación corresponde no solo a "la aplicación integral de los acuerdos de paz de 2016", sino "el estado de los contactos y conversaciones que a diversos niveles se mantiene con el ELN".