Ciudadanos que no tenían que ver con los disturbios en el sur de Bogotá se vieron afectados por los gases lacrimógenos que lanzaron contras las viviendas aledañas al portal de Las Américas, en la avenida Ciudad de Cali.
Según el brigadier general Eliécer Camacho, comandante de la Policía de Bogotá, no fueron sus hombres los responsables.
Afirmó que se registró el “lanzamiento de algunas cápsulas de gas por parte de estos delincuentes hacia los conjuntos residenciales”.
“Ellos utilizan esta táctica para afectar a la comunidad y posteriormente victimizarse y hacer creer a los ciudadanos que es el Escuadrón Móvil Antidisturbios que realiza esta actividad criminal”, agregó.
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Quienes participaron en las protestas también usaron machetes.
En el barrio Chicalá de Bosa los gases igualmente afectaron a los habitantes de los conjuntos cercanos.
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Autoridades informaron que cuatro policías resultaron heridos por los desmanes, hubo 8 detenciones -tres eran menores de edad- y destrozos en la red de semáforos de Suba, Kennedy, Bosa y Usme.
La lluvia disipó las protestas, pero los ciudadanos que estaban en sus hogares llevaron la peor parte cuando los gases lacrimógenos invadieron sus casas.
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