En una audiencia virtual realizada desde Tunja y con la participación de otras personas en Bogotá, Ibagué y Medellín, Estefanía Restrepo, una reconocida líder juvenil de la comuna 13, aceptó cargos por la muerte de un jefe de guardia de Cómbita.
La decisión de la joven de implicarse en el crimen del capitán Luis Eduardo Millán Manrique, quien era el comandante de vigilancia de la Cárcel de Alta Seguridad en Cómbita (Boyacá), se dio mediante un preacuerdo firmado con la Fiscalía y el cual ya fue avalado por el juez primero especializado de Tunja.
Noticias Caracol tuvo acceso a la grabación de la audiencia pública realizada el miércoles en la que se conoció el monto de la pena acordada por Estefanía Jiménez Restrepo y otros dos partícipes del asesinato ocurrido el martes 18 de junio de 2019.
En medio de la diligencia virtual (videoconferencia) a través de una aplicación útil en internet, el juez especializado le preguntó a la joven si comprendía las implicaciones de la aceptación de los cargos y sus efectos, lo que desató en ella el llanto.
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Cálmese, cálmese para que me pueda contestar con tranquilidad: juez primero especializado de Tunja.
"Cálmese, cálmese para que me pueda contestar con tranquilidad, reposada, relajada, la necesito en sus cinco sentidos. ¿Comprendió los derechos que le acabo de leer? ¿Sabe de qué la acusó la Fiscalía?”, reiteró el juez.
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“Sí señor… de complicidad en homicidio y porte de armas”, dijo la joven.
“Sabe que al aceptar los cargos vía preacuerdo, renuncia a un juicio público, oral y contradictorio”, volvió a preguntar el funcionario.
“Sí señor juez”.
En ese momento, el juez pasó a leer la cantidad de tiempo que aceptó la joven pasar tras las rejas por haber participado en el crimen: pagará en calidad de cómplice una condena de 204 meses, es decir, 17 años, por los delitos de homicidio agravado y porte ilegal de armas de fuego.
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También firmaron preacuerdo Sebastián Acosta Cárdenas y Santiago Álvarez Mesa en esa misma audiencia. Y con antelación lo hicieron José Manuel Pérez Valencia, Juan Pablo Velásquez Montoya y Jeffeson Cárdenas Ocampo.
Todos fueron capturados minutos después del asesinato cometido en inmediaciones de la cárcel de Cómbita cuando el capitán conducía su vehículo.
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Juan Pablo Velásquez Montoya conducía la motocicleta Discovery negra en la que iba con José Manuel Pérez Valencia, quien le habría disparado al capitán del Inpec.
Al verse sorprendido por las autoridades, leyó el fiscal del caso, Juan Pablo arrojó un teléfono móvil en el que acababa de enviar una foto del cadáver por medio de la aplicación WhatsApp con la frase “ya terminé”.
Lejos de Tunja, donde ocurrió el crimen, fue interceptado un vehículo gris marca Logan en el que iban los cómplices.
Este, al ser detectado por un retén policial, intentó huir, pero fue interceptado en inmediaciones de Puerto Araujo, un corregimiento de Cimitarra, Santander, ubicado en el Madgalena Medio.
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Conducía Sebastián Acosta y como pasajeros iban Santiago Álvarez Mesa, Jefferson Cárdenas, Estefanía Jiménez Restrepo y dos menores de edad, expuso el fiscal.
La lectura del fallo condenatorio fue fijada para realizarse, también vía virtual, el viernes 24 de julio a las 9:00 a.m.