Los lunares en la realización del Salsódromo de la 59 Feria de Cali

Foto: Noticias Caracol

Al menos 1.400 artistas se tomaron dos kilómetros de la autopista sur y pusieron a disfrutar a caleños y turistas en el Salsódromo, que le dio apertura a la edición 59 de la Feria de Cali. Sin embargo, algunos lunares empañaron la celebración. La demora en el recorrido de los bailarines y los espacios vacíos entre los shows molestaron a los asistentes.

"Tuvimos unos espacios donde la gente sintió un vacío entre las orquestas y el espectáculo que se centraba en los bailarines. Estamos haciendo una apuesta para lograr incluir a más personas en el recorrido, por lo que dispusimos de una zona más amplia, 500 metros más de recorrido, lo que provocó que hubiera espacios de transición entre la carrera 56, que implicó que se tuviera que subir y bajar un puente, lo que retrasa o disminuye la capacidad física de los bailarines para lograr hacer el recorrido en el tiempo estimado", explicó David Lerma, productor del Salsódromo.

Otra de las dificultades que se registró fue en la presentación de la orquesta invitada para el cierre, la Sonora Ponceña, la cual tuvo algunas fallas en la planta eléctrica que suplía de energía a la carroza que transportaba a la agrupación, para el movimiento del sonido y de luces. Lerma aseguró que esto se solucionó rápidamente.

"Esta es una apuesta de ciudad y de permitir más inclusión, que genera estos retrasos y que la gente en la zona tradicional estuviera esperando un desfile a las 6:00 de la tarde. Como inició en la carrera 64, que es una zona nueva, para llegar caminando o bailando a la zona tradicional, que es la 56, existió un retraso, que considero obvio, de 40 a 50 minutos", agregó el productor.

Lerma expresó que comprende la molestia de los espectadores, algunos de los cuales se fueron antes que terminara el evento, pero pidió un poco de comprensión respecto a las capacidades físicas de los artistas, quienes este año debieron realizar un recorrido más largo.

"Otra cosa que debemos entender es que tenemos muy buenos bailarines, pero son seres humanos y se cansan también, no tenemos atletas de alto rendimiento. Este Salsódromo tuvo dos enormes zonas de acceso gratuito, la primera iniciando el recorrido, con más de cien personas disfrutando el espectáculo. Todos los que estuvieron ahí pudieron apreciar las coreografías, las orquestas y el dispositivo artístico en muy buenas condiciones. La segunda zona de público de pie estaba finalizando el recorrido y ya algunos bailarines no tenían los suficientes esfuerzos físicos para disfrutar al 100 % de sus coreografías", dijo.

El productor manifestó que, pese hacer todos los ensayos previos al desfile y prepararse para hacerlo en las mejores condiciones física, no se pensó en que el recorrido era más largo que en años anteriores y requeriría de más esfuerzos físicos.

"Es una oportunidad para reflexionar, seguramente a lo largo del próximo año haremos los análisis respectivos. Aunque, desde la noche del domingo estamos trabajando con el equipo base de la dirección artística, de la producción, comité técnico y hasta vestuario, para revisar qué mejoras debemos hacer", puntualizó Lerma.