Uno de los testigos que declaró contra el presidente de la Asociación Colombiana de Camioneros (ACC) dijo haber recibido amenazas de muerte.
La Fiscalía General presentó 15 pruebas contra Aguilar, señalado de encabezar la chatarrización de al menos 12 mil vehículos de manera fraudulenta, acción que representa ganancias aproximadas a los $600 millones, es decir, $50 millones por cada camión.
El ente judicial precisó, durante la audiencia de imputación de cargos, que Aguilar tendría contactos en secretarías de Tránsito del país para acceder a las carpetas de los automotores que iban a ser chatarrizados.
“Él daba la orden, según la declaración del señor Andrés Villegas (directivo de la ACC), de qué era lo que se debía modificar a esas carpetas o adulterar”, indicó el fiscal auxiliar.
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El funcionario, además, reveló que uno de los testigos fue amenazado de muerte “porque sabía mucho”.
Dicho declarante manifestó que quien “lo fabricó (el cartel) y lo corrompió en Colombia se llama Pedro Antonio Aguilar Rodríguez”.
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Aguilar fue imputado por los delitos de concierto para delinquir en concurso heterogéneo con fraude procesal, en concurso con el de uso de documento falso y supresión u ocultamiento de documento público.
Junto a él también fueron imputados Lina Piedad Sánchez Sánchez, María Mabel Sánchez, Parménides Reinelio Gueltrán y Juvenal Yantén Agredo, quienes se declararon inocentes.