Además de rechazar estas interceptaciones, pidieron al gobierno que brinde garantías para continuar ejerciendo el periodismo.
Para Alejandro Santos, director de revista Semana, lo sucedido es grave y desvía el propósito inicial de las labores de inteligencia de perseguir a los criminales y los bandidos.
Santos señaló que la utilización de tecnología de inteligencia militar “debe estar añorada por la Constitución, por los protocolos, por la ley de inteligencia y no desviando su función afectando la libertad de prensa”.
Aseguró que para solucionar el problema es necesario un remezón en la fuerza pública.
Directores de otros medios de comunicación manifestaron su rechazo y pidieron al gobierno nacional tomar medidas.
Por su parte, el director de Noticias RCN Juan Lozano solicitó que “las investigaciones deben ser muy rápidas, sin dilaciones ni carrera” y agregó que espera que el Ministerio de Defensa “retire inmediatamente del servicio a todos aquellos que puedan resultar implicados en estos hechos”.
La Fundación para Libertad de Prensa emitió un comunicado en que indica que estas interceptaciones intimidan y entorpecen el trabajo periodístico. Además, aseguró que “no se trata de unas manzanas podridas” sino que es un hecho que se debe entender como “un aparato al interior del Ejército Nacional”.
Asimismo, le exigió al gobierno nacional brindar garantías para el ejercicio del periodismo.