El canadiense, que grabó en Colombia un remix de la canción de moda, puso a vibrar a miles de personas con su español.
Fonsi, como siempre vestido de negro, cantaba y luego Bieber trataba de imitar el resto de la letra que, por cierto, se aprendió muy juicioso.
Al final, Justin agradeció a Fonsi y el boricua se rindió al público de su país.