Publicidad
Publicidad
Publicidad
Publicidad
El volante colombiano James Rodríguez se encuentra sin equipo, tras su salida de León, pero sigue mirando opciones para llegar con rodaje al Mundial de 2026 con la Selección Colombia. En medio de ese panorama, en las últimas horas se dio una sorpresiva revelación sobre el '10'. ¡Le tenían un particular apodo en sus inicios en el Porto!
Maicon Pereira Roque, lateral derecho brasileño, contó como le decían al talentoso mediocampista. “James es curioso, solíamos llamarlo el jugador de PlayStation; su pequeño toque era como una PlayStation”, dijo en charla con 'CharlaPodcast'.
Por otro lado, el futbolista carioca agregó que el 'cafetero' tuvo su proceso de adaptación en los 'dragones'. “James pasó seis meses sin jugar en el Oporto. Solo entrenaba, el cuerpo técnico trabajaba preparándolo, solo entrenaba, solo entrenaba. Después de que empezó a jugar, amigo mío, para frenarlo puff...”, agregó.
Poco a poco Rodríguez Rubio se convirtió en figura del conjunto portugués y sus propios compañeros sabían del alto impacto que tenía. “Hubo un momento en el Oporto en el que decíamos: “Tío, no necesitas retroceder, no necesitas correr, no necesitas cansarte para marcar. Dale el balón, él lo resolverá”, concluyó.
Publicidad
El Porto ocupa un lugar central en su trayectoria. Con el club portugués disputó 108 partidos, anotó 32 goles y repartió 42 asistencias, igualando su mejor registro creativo por club. En 7.242 minutos, James se consolidó como mediapunta determinante, con alta participación en la generación de juego y llegada constante al área. Además, su disciplina fue notable: 12 amarillas y solo una expulsión, lo que evidencia control competitivo pese a su protagonismo. En Porto ganó regularidad, asumió responsabilidades en balón parado y dio el salto definitivo al fútbol de élite europea.
Antes y después, mantuvo estándares altos: en Real Madrid sumó 125 partidos, 37 goles y 42 asistencias, con mayor exigencia táctica y rotación. En Bayern Múnich, aportó 15 goles y 20 asistencias en 67 encuentros, mientras que en Mónaco fue clave con 10 goles y 14 asistencias en solo 38 partidos. Sus pasos por Everton, Olympiacos y otros clubes fueron más cortos, con menor continuidad.
Publicidad