Con documentos falsos, dos asesinos se escapan de cárcel en Florida

Las autoridades buscan a dos asesinos que usaron documentos falsos para escapar de una prisión en Florida, al tiempo que funcionarios penitenciarios y fiscales en todo el estado intentan asegurarse que ningún otro recluso salga con la misma astucia.
La revisión se produce tres semanas después de que Joseph Jenkins, declarado culpable de asesinato, saliese de la prisión pese a estar cumpliendo cadena perpetua. Una semana después, Charles Walker, también sentenciado a cadena perpetua, fue dejado en libertad de la misma forma.
No estaba claro exactamente quién preparó los documentos falsificados que ordenaban la libertad de los dos reclusos. Las autoridades dijeron que en ambos casos la documentación fue presentada en los últimos dos meses e incluía firmas falsificadas de la oficina del mismo fiscal y del juez Belvin Perry. Los documentos pedían sentencias de 15 años de prisión.
Perry dijo el jueves que hubo varias señales sospechosas que debieron haber llamado la atención de la oficina del secretario de la corte y del Departamento de Prisiones. Específicamente, es inusual que un juez ordene una reducción de sentencia y más inusual que sean los fiscales los que la soliciten.
"Una de las cosas que nunca hemos examinado de cerca es la verificación de un documento en particular para estar seguros de que es auténtico", dijo. "Sabía que eso siempre fue una posibilidad, pero uno nunca quiere que esa posibilidad ocurra tal y como lo hizo".
Algunos prisioneros han tenido éxito al intentar usar documentos falsos para escaparse. Muchas falsificaciones son descubiertas pronto, pero ha habido casos en los que los reclusos lograr salir en libertad.
En Florida, Jenkins salió el 27 de septiembre y Walker el 8 de octubre.
Jenkins, de 34, fue declarado culpable de asesinato intencional por la muerte en 1998 de Roscoe Pugh, residente de Orlando, en un intento de robo.
El fiscal estatal Jeffrey Ashton dijo que se enteró de que Jenkins había quedado libre cuando la familia Pugh se puso en contacto con su oficina. Ashton revisó la documentación y descubrió que era falsa, y lo notificó a las agencias policiales.
Más tarde, las autoridades descubrieron que los documentos de excarcelación de Walker también eran falsos.