Operativo tras robo de una camioneta fue de película: un ladrón se escondió debajo de un carro

De película, así fue la persecución de los policías en las localidades de Rafael Uribe Uribe y Tunjuelito a una banda deladrones de carros en el sur de Bogotá. Tras el robo de una camioneta, los uniformados interceptaron a los delincuentes en el barrio Gustavo Restrepo.

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“Estábamos guardando la camioneta en un parqueadero. Llegan los tres individuos en otra camioneta, se bajaron y me encañonaron”, señaló la víctima del hurto.

Uno a uno fue cayendo cada uno de los miembros de esta temida banda. Los criminales, ante el acoso de los agentes, abandonaron sus armas en la terraza de una vivienda.

En medio de esas pesquisas, uno de los sujetos que participó en el robo de una camioneta fue hallado debajo de un vehículo.

“Se activa el plan candado por parte de las unidades del modelo nacional de vigilancia comunitaria por cuadrante y se logra la recuperación del automotor en el sector de Tunjuelito, así como la captura de tres personas y la incautación de dos armas traumáticas y un arma de fabricación artesanal”, precisó el teniente coronel Carlos Montañez.

Esta banda dedicada al hurto de vehículos venía haciendo de las suyas desde hacía varias semanas. Los capturados fueron trasladados hasta la estación de Policía de la localidad Rafael Uribe Uribe.

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A propósito de robo de vehículos y sus partes, un conductor se salvó de ser víctima de los ladrones gracias al rápido actuar que tuvo otra persona que iba en un vehículo tipo van. Los hechos habrían ocurrido en la carrera décima con calle segunda de Bogotá. En un video se registró cómo un delincuente de espejos por poco logra robar a un ciudadano.

En un video viral se ve a un hombre vestido con saco negro, pantalón vino y gorra negra acercarse un carro Chevrolet Spark blanco. Tras compartir algunas palabras con el conductor procede a intentar romper el espejo para llevárselo.

A su vez, se aprecia cómo la víctima desesperadamente intenta sostener el elemento.

Segundos después, una van se orilla hacia el carro de la víctima para intentar evitar el hurto.

El ladrón de espejos alcanza a romper el soporte del retrovisor, pero sale corriendo antes de quedar arrinconado entre ambos vehículos.

Para colmo, el delincuente se enoja con el conductor de la van por haber frustrado el hurto. Empieza a alegar y luego termina hablando con otra persona que estaba sentada en el andén viendo los hechos.

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