La ricina ha sido usada como arma de guerra hace décadas y sus efectos han sido conocidos y estudiados.
Máximo Duque, médico forense, explica que la ricina "es clasificada como un arma biológica y está prohibida en todo el mundo, es letal, solo con un grano produce daños. Esta sustancia puede ser inhalada, ingerida o inyectada y, de acuerdo con la vía, produce síntomas.
"Inhalada produce inflamación en los pulmones, la persona empieza con síntomas a las 4 horas y puede durar varios días antes de morir", explicó Duque.
Agregó que, cuando entra en contacto con la piel, "se habla de diarrea, vómito con sangre y deterioro general".
Sin embargo, si se identifica a tiempo y se inicia un tratamiento la persona puede sobrevivir.
Para este tipo de sustancia no existe antídoto.