Es sencillo, de bajo costo y cumple con lo exigido, dijo el rector Obdulio Velásquez Posada. Solo falta aprobación de Invima y recursos para producción masiva.
El director de la Universidad de La Sabana habló del trabajo que vienen realizando estudiantes, profesores y hasta empleados de servicios generales, desde diferentes frentes, para enfrentar lo que viene con el coronavirus en Colombia.
Una de esas labores está en la clínica de la universidad, que fue declarada como hospital centinela de Cundinamarca para el COVID-19 .
Preocupados también por la atención de pacientes que lleguen a contraer el coronavirus, en un trabajo conjunto con la Fundación Neumológica, las facultades de Medicina e Ingeniería y el mismo centro clínico, se diseñó un ventilador mecánico o respirador.
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“Se hicieron ensayos en laboratorio, estamos pendientes de pasarlo al Invima para aprobación. Es un prototipo sencillo, de bajo costo, que cumple las diez funciones que piden a nivel internacional”, explicó el rector Velásquez.
Para que pueda producirse, el funcionario dijo que se necesitan recursos.
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“Hacemos los prototipos, tenemos cinco. Viene la fase de escalada. El Gobierno estima mil aparatos que se necesiten en la emergencia en Cundinamarca, aunque son cifras inciertas. Estamos contactando a la empresa privada que pueda vincularse a la producción y aliados estratégicos que permitan buscar y donar los recursos”, precisó.
Estos ventiladores deben estar listos “en ocho o diez días. Las velocidades de respuesta deben ser sincronizadas”.
Pero, agregó el rector de La Sabana, no es el único frente en el que trabajan estudiantes y personal de la universidad.
Los jóvenes siguen cumpliendo virtualmente con su calendario académico y eso ha permitido que no se cancele el semestre.
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Además, hay personal de servicios generales que están haciendo tapabocas y elementos de protección contra el coronavirus .
Asimismo, hay estudiantes trabajando en donaciones para centros de adultos mayores.
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