Los 240 hogares, 100 del vecino país, se asentaron en el corregimiento de Bayunca en un sitio que, dicen, no tiene dueño porque es un camino ancestral.
Las familias dicen que se “han ido pa’l monte a cortar palitos y nos han donado estibas, alambre” para levantar sus humildes viviendas.
Dámaso Gómez, líder de estas personas, afirman que necesitan apoyo de autoridades para que el agua no se entre a sus casas. También piden ayuda para instalar luz y contar con servicios básicos.
“Que nos den algo escrito que podemos estar aquí”, añaden a sus peticiones.
Updated: marzo 01, 2019 09:47 a. m.