Garantizar que este servicio no deteriore ni perjudique el carácter histórico y patrimonial de esta importante avenida, uno de los retos para el Distrito.
“Uno va por la Caracas con calle 50 y lo que ve son prenderías, edificios abandonados y eso no puede ser, eso no puede pasar en la Séptima”, aseguró Luis Guillermo Plata, director de Probogota.
Este proyecto le costará a la ciudad cerca de 2,4 billones de pesos y el propósito, según la administración distrital, es una renovación urbana.
“Estamos seguros de que hay lecciones aprendidas para la construcción de Transmilenio por la Séptima, taquillas fuera de estaciones para generar menos congestión y más velocidad en la entrada, mayor espacio público, estaciones más transparentes y más limpias, estacione más altas, bioclimatizadas”, afirmó Miguel Turbay, secretario de Gobierno de Bogotá.
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Eliminar semáforos y disminuir de 300 a 140 buses, con una velocidad promedio de 24 kilómetros por hora, es otro de los desafíos.
“La mitad de la inversión tiene que ver no con buses sino con el desarrollo de una cicloruta de 11 kilómetros, una reconstrucción de todos los andenes, la habilitación de nuevos espacios públicos, con una serie de soluciones viales. Transmilenio no se convertirá en otra avenida Caracas”, resaltó Juan Pablo Bocarejo, secretario de Movilidad de la capital.
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“Ya tenemos claro que, de los 127.000 predios, solo se requiere el 1% y aproximadamente estamos hablando de 325 terrenos, tenemos los recursos para comprarlos”, aseguró Yaneth Mantilla, directora del IDU.
Se estima que cuando entre en funcionamiento Transmilenio por la carrera Séptima, se movilizarán cerca de 24.000 pasajeros hora.
Vea, además, como operará Transmilenio por la avenida 68 y avenida Ciudad de Cali:
Obras de Transmilenio por avenida 68 y Ciudad de Cali iniciarán en...
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