En la localidad de Kennedy, dos delincuentes ingresaron a un asadero, uno de ellos sacó de la chaqueta un arma de fuego e intimidó a los empleados que estaban a punto de cerrar el local. Mientras, el otro ladrón pidió una bolsa con la que envuelven los pollos para que el mismo cajero guardara un millón y medio de pesos, botín con el que huyeron.
Los atracadores, en medio de insultos y amenazas, obligaron a sus víctimas a refugiarse en el baño, mientras ellos escapaban de lugar.
Al parecer, los delincuentes han robado en varias tiendas de barrio Timiza.
Updated: marzo 11, 2016 11:24 a. m.