Otro accidente en embalse de Guatapé deja un menor con muerte cerebral

Investigan por qué los botes violaron la restricción de movilidad y por qué uno de ellos no tenía luces.

El accidente ocurrió a las 7:30 de la noche del sábado cinco de agosto en inmediaciones de El Peñol y Guatapé cuando dos lanchas chocaron. Las autoridades habían prohibido la circulación de embarcaciones luego de las 6:00 p.m. después de la tragedia de El Almirante, sucedida el 25 de junio.

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En una de las lanchas accidentadas la noche del sábado iban tres personas, una de las cuales resultó con lesiones de consideración. Su nombre es Santiago García Zea, de 16 años, quien fue remitido al Hospital San Juan de Dios de Rionegro, donde según sus familiares le diagnosticaron muerte cerebral.

Víctor García, tío del menor, explicó lo sucedido: "Él iba en la represa de Guatapé a recoger una pareja que estaba en la Marina de Navegar (una zona donde se parquean algunas embarcaciones), cuando iba aproximándose, vino un bote y lo arrolló, destruyéndole el bote en el que él iba y provocándole múltiples fracturas de cráneo y cara".

"En estos momentos depende de un respirador artificial, depende de un milagro", añadió el familiar luego de ser contactado por Noticias Caracol.

Al preguntársele por qué el menor había hecho caso omiso a la restricción de movilidad en la represa en horas de la noche, dijo: "Tiene toda la razón, está prohibido. La cabaña (donde él estaba) queda a dos cuadras de ahí y de pronto se confió", explicó.

Fuentes consultadas por Noticias Caracol revelaron, además, que una de las embarcaciones involucradas no llevaba un sistema de iluminación que le permitiera ser percibida en medio de la oscuridad del embalse por otras.

Santiago estaba estudiando en el Colegio Cumbres en 11 grado y se preparaba para iniciar el año curricular número 12.

"Es un excelente deportista, excelente tenista. Ganó varias ligas de tenis", manifestó el familiar, al hacer referencia a torneos categoría aficionados en ese deporte.

Mientras Santiago es atendido en la Unidad de Cuidados Intensivos del San Juan de Dios, los dos compañantes se recuperan de lesiones leves.

Las autoridades locales indagan si los conductores de las lanchas tenían permiso para conducir este tipo de vehículos.

Este es el primer accidente que se presenta luego del naufragio de una embarcación de nombre El Almirante.

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