Superintendente reconoció que históricamente no se había adelantado ninguna averiguación preliminar para supervisar sistemas técnicos, pero la situación cambió.
La entidad recibió 927 quejas de diferente tipo en 2019, casi el triple frente a las interpuestas en 2018, y en lo que va del año ya hay 54 reclamos.
Carmen Ligia Valderrama, superintendente de Transporte, reveló que en este momento se están adelantando 38 averiguaciones preliminares sobre presuntas irregularidades con las cámaras, de las que solo cuatro en todo el país están calibradas.
Las sanciones que correspondan tras culminar las investigaciones, indicó, recaerán en quienes solicitan la autorización para montar esos sistemas, es decir las autoridades de tránsito de cada municipio.
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El castigo, señaló Valderrama, podría ser la suspensión del sistema hasta que se solucione el problema.
La superintendente agregó que a partir de mayo van a ser la Agencia Nacional de Seguridad Vial y su entidad las que vigilarán estas cámaras.
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