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Sylvia Duzán: 30 años de dolor e impunidad

Sylvia Duzán: 30 años de dolor e impunidad

Por hacer buen periodismo, paramilitares la asesinaron junto a tres líderes de la Asociación de Trabajadores Campesinos del Carare. Su talento hace mucha falta.

Este miércoles se cumplen 30 años de esta masacre, perpetrada por paramilitares en Cimitarra, Santander.

Sylvia Duzán no estudió periodismo, pero este oficio la rodeó toda la vida y se convirtió en su pasión.

Su padre, Lucio, fue uno de los comunicadores más destacados de la década de los 90 y su hermana María Jimena Duzán es una de las grandes periodistas de Colombia. Por sus venas corría el talento. Eso la llevó a ejercer el oficio en una de las épocas más duras para la profesión.

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Se graduó de Economía en la Universidad de los Andes, pero nunca ejerció. Desde muy joven se dedicó a escribir y a investigar. Así llegó a ser parte de un ambicioso proyecto audiovisual que la llevó hasta las balas de los criminales. 

Su rigurosidad fue determinante para elegirla como la persona que estaría al frente de un documental que narraba la lucha del Magdalena Medio. Hace tres décadas, en medio de esa labor, fue asesinada por paramilitares.

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‘Las otras guerras de la coca’, ese es el nombre del trabajo que realizó en Cimitarra, Santander. Fue terminado en su honor por la productora independiente Citurna, que dirigen Adelaida Trujillo y Patricia Castaño, quienes la habían buscado para la investigación.

Sylvia fue una mujer alegre, apasionada y muy rigurosa, características que permanecen en el alma de quienes trabajaron cerca de ella.

En 1990, dos meses después de la masacre, la Asociación de Trabajadores Campesinos del Carare recibió, de parte de una fundación en Estocolmo, el premio nobel alternativo de paz.

De otro lado, la Fundación para la Libertad de Prensa logró que la Fiscalía declarara esta masacre como delito de lesa humanidad.

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Y aunque la paz llegó a la región del Carare, sus habitantes reclaman más apoyo social y económico de las instituciones que, según ellos, los dejaron en el olvido.

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