La menor, que sufría convulsiones, tomó la medicina 7 días hasta que familia notó equivocación. Madre dijo, además, que le quitaron hospitalización domiciliaria.
“Me di cuenta porque soy regente de farmacia, conozco los medicamentos y en un momento en que la enfermera los iba a administrar pude evidenciar que en la mano tenía clozapina en vez de clobazam, y empezaron las investigaciones a ver qué era lo que había pasado”, relató Lorena Renalth, mamá de la niña.
Denuncia que a su hija no le hicieron exámenes médicos para determinar si sufrió algún problema por la ingesta de la medicina equivocada.
Además, afirma que la prestadora de servicio retiró a la menor del programa de hospitalización domiciliaria “por represalias contra mí debido a todas las quejas que he instaurado”.
Publicidad
La IPS, que un comienzo reconoció el error, no se ha pronunciado.