¿Es mejor la prueba de diagnóstico de COVID-19 o la de anticuerpos?

La aplicación de estos tests depende de cuál es más útil para cada momento, así que deben complementarse entre sí y su uso debe ser racional.

¿Qué son las pruebas de anticuerpos?

En el caso de esta pandemia, las pruebas de anticuerpos son las mismas pruebas rápidas o serológicas, mientras que los anticuerpos son defensas, es decir sustancias que produce el cuerpo para combatir una infección. Esas sustancias se pueden detectar en la sangre.

Son las que determinan si una persona ya tuvo el virus y, como consecuencia, desarrolló las defensas. Lo que aun no se sabe es qué tan fuerte y duradera es esa inmunidad o si protege de futuras reinfecciones.

Estudios han mostrado que cada persona empieza a desarrollar defensas contra el COVID-19 entre una y tres semanas después de la infección. Algunos se pueden demorar más tiempo e incluso habrá personas que nunca las desarrollen. 

Por lo tanto, estas pruebas no son útiles en los primeros días de infección para saber si una persona tiene o tuvo el coronavirus.

¿Para que sirve saber si una persona tuvo el virus y desarrolló defensas? 

Esa información ayuda a entender mejor la realidad e impacto de la pandemia, sirve para estimar de manera mas precisa cuántos individuos se han infectado, qué tanto se ha propagado el virus y demás datos. 

Un alto porcentaje de las personas no muestra síntomas, son leves o moderados, o sencillamente no se enteran de que tuvieron el virus. 

Es por lo anterior que entre más se detecten personas con estas defensas, más fácil será pronosticar el comportamiento y ajustar las medidas.

Por otro lado, las pruebas de anticuerpos se hacen en sangre, son económicas y dan resultados en minutos, pero no todas funcionan ni ofrecen resultados confiables, precisos y de calidad.

La prueba de diagnóstico PCR es la que detecta el virus como tal.