Además, todas las áreas de la plaza son desinfectadas con un minucioso proceso de lavado.
“Se detecta un brote en uno de los sectores a través de una joven que vive en el barrio Sinaí, estaba asintomática y por eso genera unos contagios a sus compañeros, se hace el cerco epidemiológico y se cierran los establecimientos”, explicó Édison Alexander Palacio, gerente de la Plaza Minorista.
El gerente se refiere al sector de Santa Cruz parte baja, que estuvo aislado por 14 días, al ser el principal foco de contagio en la ciudad.
Los protocolos en el ingreso de la plaza se fortalecen, mientras unos cuatro mil empleados tratan de seguir adelante con sus ventas, principalmente de verduras, frutas y granos.
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“Deben tener correctamente el uso del tapabocas, se debe desinfectar manos y pies y también toma de temperatura. Adicional a esto, la medida obligatoria del pico y cédula también la exigimos”, añadió Palacio.
“Desde que uno tenga protección no es que sea mucho el susto, desde que uno esté protegido y cumpla las normas de bioseguridad”, comentó Jaime Humberto Ruiz, comerciante.
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“Veo la minorista muy bien por el manejo que ustedes están haciendo con esto”, manifestó Rocío Monsalve, compradora.
La segunda central de abastos más importante de Antioquia, tiene un aforo del 40 por ciento, dejando a unos seis mil empleados por fuera de manera temporal, mientras se rehabilita el 100 por ciento de la operación.