Algunos damnificados aseguran que sus casas quedaron totalmente destruidas y hacen un llamado al Gobierno Nacional para que les brinden ayudas.
Una de las afectadas es María del Socorro Pérez, quien vio cómo su vivienda era destruida por un deslizamiento de tierra, que se llevó parte de las habitaciones. "Quedó sirviendo para nada. Hemos pedido ayuda, pero no nos han colaborado, porque no es la primera vez", afirma.
Como el de Pérez, otros 15 inmuebles del oriente y occidente de la capital del Cauca han resultado afectados como consecuencia de emergencias registradas por las fuertes lluvias.
De acuerdo con el Cuerpo de Bomberos del municipio, se han reportado destechos de viviendas e inundaciones por desbordamientos de algunas quebradas aledañas a estas, ocasionando daños en enceres y otros elementos de las residencias.
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Por el momento, los organismos de socorro y el Comité Local de Emergencia monitorean el río Molino, uno de los afluentes que representa riesgo de desbordamiento según las autoridades.