Las lluvias que han caído en la ciudad agudizaron la situación de cientos de familias afectadas por derrumbes que arrasaron las tuberías del acueducto.
María Muñoz hace parte de los cinco mil habitantes, que se calcula, hay en los barrios Vistahermosa y Patio Bonito, en la ladera occidental de Cali. Dice que hace casi quince días están sin agua.
“Para lavar la ropa toca amontonarla y cuando llega agua se lava, pero cuando está lloviendo es barro, no se puede tomar esa agua, toca comprarla”, señala.
El agua de los dos barrios proviene del acueducto rural del corregimiento La Elvira, afectado por varios derrumbes tras los fuertes aguaceros de los últimos días.
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Árboles caídos, inundaciones y hasta colapso de estructuras, consecuencias de fuerte lluvia en Cali “Tenemos cinco deslizamientos y necesitamos una docena de tubos de seis pulgadas, pero el tema no es ese. El tema es que el terreno es inestable y sigue lloviendo. La montaña está hecha una colada”, explica Ancízar Suárez, presidente de la acción comunal del sector.
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Frente a la escasez de agua, Luis Ferney Aranzazu, expresidente de la Junta de Acción Comunal, asegura que propuso a Emcali conectarlos a la red municipal, pero la comunidad se opuso y, por eso, dice que hoy tienen que conformarse.
Mientras se espera que deje de llover en la parte alta y se intenta reparar las tuberías, los afectados piden a las empresas públicas evaluar la posibilidad de conectarlos a la red de acueducto del resto de la ciudad.