A la audiencia solo asistió el asesor espiritual Manuel Salvador Ibarra. Él y Jaime Gutiérrez Ospino fueron hallados culpables de homicidio culposo agravado.
Los hechos se remontan al 18 de mayo de 2014, cuando 33 niños fallecieron calcinados por imprudencias cometidas por parte de los imputados, según el fallo judicial leído en Santa Marta.
Gutiérrez, quien conducía el vehículo, huyó de la escena antes de auxiliar a los menores que gritaban por ayuda en medio de las llamas.
El pastor perdió a su hija en la tragedia de Fundación, Magdalena.
Publicidad
En contexto:
Tragedia en Fundación: "Dios, ahí te enviamos estos angelitos"