La Mesa de Derechos Humanos en Medellín denunció la deplorable situación de los presos en diferentes centros carcelarios de la ciudad.
“Fue el Inpec con 112 comidas dañadas, para las personas que están aquí y la reacción de los presos fue tirarlas al piso y no comer. Son seres humanos que aquí están pagando sus errores”, indicó Jorge Carmona, integrante de la Mesa de Derechos Humanos.
De manera simultánea la Mesa denunció que dos policías fueron retenidos por más de dos horas adentro de los calabozos del Palacio de Justicia, donde permanecen hacinados más de 64 presos.
A la preocupación de las familias por las condiciones inhumanas de los presos, se suma la idea de que las autoridades no realizarán más capturas.
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“En este momento la situación está muy compleja, ni la Sijín ni la Alpujarra ni la Fiscalía ni las estaciones de policía tienen donde meter un detenido más. Lo que sigue de aquí para allá es que no van a seguir capturando así la institucionalidad diga que no y eso pone en peligro a la ciudadanía”, dice Carlos Arcila, otro miembro de la Mesa.
Por su parte, las autoridades informaron que continuarán cumpliendo con su labor.
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