En Totoró, municipio del Cauca, familiares y la comunidad indígena a la que pertenece Ángel Zúñiga, patrullero de la policía que se opuso a un desalojo en Pance, zona rural de Cali, pidieron solidaridad con el uniformado y que no se levanten sanciones en su contra.
Los allegados del patrullero, que lleva 10 años dentro de la institución, afirmaron que él solamente obedeció a los principios que dentro de su hogar se la han inculcado.
“Mi hijo pensó como ser humano, pensó en su familia y pensó qué podría ser de nosotros si nos tocara ese caso. Se olvidó que era policía y se puso en los zapatos de esa pobre gente, más aún cuando estamos en esta pandemia”, dijo Dolly Amanda Valencia, madre del patrullero.
Dolly Amanda puntualizó que su hijo fue una ayuda divina: “Fue el ángel que Dios les envió a esas personas. Yo sé que Dios desde ya nos bendice y vamos a tomar con calma lo que venga de aquí en adelante”.
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Asimismo, Rubén Zúñiga, el padre del uniformado, aseguró que él se crío bajo valores humildes.
“Mi hijo es un verraco, son cosas que desde muy pequeño se le enseñaban a él. Somos honrados, somos personas humildes”, dijo su progenitor.
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El patrullero Zúñiga es miembro activo del cabildo indígena del pueblo de Totoró, por eso, su acción ha recibido el respaldo de su comunidad, así lo afirmó Hárold Sarria, presidente de la Junta Central del municipio en mención.
“Se le salió el indio, antes de ser policía es un ser humano que vio lo que pasaba ahí. Prácticamente defendió al pueblo”, dijo Sarria.
El acto del patrullero se llevó a cabo en la mañana del pasado 9 de junio de 2020 en La Viga, un sector del corregimiento de Pance, ubicado al sur de Santiago de Cali, en medio de un desalojo a un asentamiento subnormal que allí se levantó.
En contexto:
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Esto pasará con policía que se negó a participar en desalojo de cinco familias.
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Congresistas piden condecorar a policía que se opuso a desalojo en acto que “llena de esperanza”.