Pablo Cervantes, de 78 años, es uno de los ancianos que fue internado en un hogar para adultos mayores y nunca más supo de su familia.
“Yo tengo cuatro años que no vivo con ellos y no los veos”, detalla.
Luz Stella Torrizo, de 51 años, es madre de tres hijos y fue abandonada en un geriátrico hace cuatro años. Ella asegura que fue dejada allí porque estaba enferma.
La cifra de padres abandonados es preocupante. Según la Secretaría de Integración Social de Bogotá, a diario dejan a cinco abuelos desamparados en la capital del país.
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El representante a la Cámara Rodrigo Lara indica que hay 1.500 casos de maltratos hacia abuelos. De este número, el 42% corresponde a violencia por parte de los hijos.
Al proyecto de ley le restan tres debates en el Congreso de la República.
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