El joven duró diez días encerrado en un patio, amarrado a un lavadero, luego de ser interceptado por unos sujetos en Turbo, Antioquia.
El estudiante de ingeniería viajó ilusionado de Bogotá a este municipio ubicado en el Urabá antioqueño a concretar lo que, según él, sería el negocio de su vida.
Sin embargo, apenas llegó a Turbo fue secuestrado.
"Buscando negocios para una empresa que tenía pensado montar de fábrica de máquinas para la industria alimenticia, se suponía que allá iba a encontrar a unos inversionistas, cuando llegué allá me abordaron unos sujetos y me dijeron que yo allá estaba en calidad de retenido por cuenta del Clan del Golfo", contó Agustín Adolfo Loaiza, el estudiante rescatado.
A partir de ese momento aseguró que empezó su infierno.
"Lo más duro era cómo me tenían en un colchón tirado en un patio. Ellos me amedrentaban todos los días, me amenazaban con que me iban a descuartizar, a picar", aseguró Agustín Adolfo Loaiza.
Mientras lo amenazaban, otros integrantes de la banda se comunicaron con su familia en Bogotá para exigirle dinero por su liberación.
"Exigiendo la suma de 37 millones de pesos", señaló el general Fernando Murillo, director del Gaula de la Policía.
Lo que no sabían los secuestradores era que estaban negociando con una de las hermanas del joven secuestrado, una de las mejores policías del país.
"Estas tres personas que delinquen en Turbo, Antioquia, eran parte del Clan del Golfo dedicados a extorsionar a los comerciantes y ciudadanos de esta parte del país y secuestrador a personas que veían que no eran de la región”, indicó Murillo.
Con esa información ubicaron a los secuestradores y a la víctima. Tres de los secuestradores fueron capturados.
Updated: febrero 08, 2019 03:35 p. m.