La Superintendencia de Industria y Comercio había asegurado que incurrió en el aprovechamiento de un conflicto de intereses.
Este señalamiento lo hace porque el vicepresidente del grupo Aval, Diego Fernando Solano, es el esposo de María Victoria Guarín, alta funcionaria de la corporación financiera internacional encargada de estructurar la licitación del contrato de la Ruta del Sol II.
El grupo Aval contestó en un comunicado que: “En el marco de dichas investigaciones no hay pruebas que demuestren que en las prácticas de soborno de Odebrecht haya participado el Grupo Aval, Corficolombiana, ni Episol. De la misma forma, es claro que ni desde las cuentas de Corficolombiana ni de las de su filial, Episol, se efectuaron pagos irregulares”.
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Updated: septiembre 15, 2018 02:20 p. m.