La masificación de las redes, al igual que la facilidad de escribir desde el anonimato, han hecho que proliferen delitos como el ciberacoso.
Esta es una conducta que se desarrolla en entornos digitales como redes sociales, correo electrónico o aplicaciones. Implica una amenaza o agresión sistemática y repetitiva.
Con esto se busca intimidar, provocar o excluir a la persona. Los niños y adolescentes son las principales víctimas. También se ve entre conocidos.
Para contrarrestarlo, evite contestar a las provocaciones, ya que esto ocasiona que el ataque se recrudezca.
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Recuérdeles a niños y adolescentes pedir ayuda principalmente de sus propios padres o familiares y que lo hagan de forma rápida y decidida.
Guarde las conversaciones y publicaciones de las agresiones o las fotos y audios con las amenazas, son la evidencia para reportar y denunciar el caso.
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Para dar aviso a las autoridades lo puede hacer por el canal digital puede hacerlo en Te protejo dedicado a menores de edad. O acuda al CAI virtual .