La familia identificó a su mascota y quiso recuperarla, pero el final no resultó como lo imaginaron.
A un joven le causó curiosidad ver a un perro apostado siempre a un lado de la carretera, como si esperara a alguien. Decidió fotografiarlo y compartir la imagen en las redes sociales.
Los dueños del animal lo reconocieron y se pusieron en contacto con el joven al que le contaron que su mascota se llamaba BonBon y que habían perdido su rastro durante un viaje de vacaciones.
En un descuido de la familia, el perro se bajó del vehículo en una estación de gasolina y se extravió.
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Durante esos cuatro años, el animal permaneció en el mismo lugar: una carretera tailandesa.
Una mujer, conmovida al verlo en los huesos y con lepra, se lo llevó a su casa, lo alimentó y le curó las heridas. Ah, y lo llamó Leo.
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Cuando se sintió con fuerzas, el perro escapó de la vivienda y volvió a estacionarse al borde de la misma carretera. La mujer lo entendió. No abandonó a Leo, por el contrario, lo visitó con frecuencia para alimentarlo y hacerle compañía durante su larga espera.
Los dueños de BonBon fueron a su reencuentro. Aunque el animal los reconoció y saludó amigablemente, se negó a irse con ellos.
Lo increíble vino luego, cuando Leo decidió irse con la extraña que durante todos esos años vio de él. Amores perros.
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