El expresidente de Renault-Nissan estaba en detención domiciliaria en Japón, donde esperaba un juicio por malversación financiera.
Líbano recibió este jueves una orden de arresto contra el exmagnate del automóvil Carlos Ghosn, de 65 años, refugiado en ese país tras escapar de Japón, donde estaba inculpado por malversación financiera, una rocambolesca huida que su protagonista asegura ahora que organizó en solitario.
"La fiscalía general (...) recibió una alerta roja de Interpol concerniente al caso Carlos Ghosn", indicó el ministro de Justicia libanés, Albert Sarhane.
Ghosn, que tiene las nacionalidades libanesa, francesa y brasileña, cuenta con una casa en Beirut, donde podría estar recluido, mientras que en el exterior montan guardia equipos de televisión.
Medios de comunicación han empezado a divulgar detalles de su huida, que realizó vía aérea con escala en Turquía.
El gobierno de Ankara anunció este jueves la detención de siete personas, entre ellas cuatro pilotos, tras el paso del expresidente de Renault-Nissan por Estambul, antes de llegar el lunes a Beirut.
"Las alegaciones en los medios de comunicación según las cuales mi esposa Carole y otros miembros de mi familia habrían desempeñado un papel en mi salida de Japón son falsas y mentirosas. Yo solo organicé mi salida", explicó Ghosn en un corto comunicado.
Pesquisas en Japón
Las televisiones japonesas mostraron este jueves imágenes de los inspectores entrando en la casa de Tokio donde el exdirector de Renault y Nissan estaba en arresto domiciliario.
El exmagnate fue detenido en Tokio en noviembre de 2018, acusado de malversación financiera, y tenía que ser juzgado en Japón a partir de abril de 2020. Tras pasar un total de 130 días en prisión estaba en arresto domiciliario.
El que llegó a ser el presidente ejecutivo mejor pagado de Japón se enfrenta a cuatro cargos en este país: dos por ingresos diferidos no declarados a las autoridades bursátiles por Nissan y otros dos por abuso de confianza agravado.
Según fuentes de la investigación citadas por la prensa japonesa, los inspectores de la Fiscalía de Tokio están examinando las imágenes de las cámaras de seguridad en la entrada de su domicilio y en el barrio donde vivía.
Demanda en Líbano
En Turquía, los primeros elementos de la investigación oficial indican que un avión privado llegó en la madrugada del lunes a un aeropuerto de Estambul proveniente de la ciudad japonesa de Osaka, y que una hora más tarde otro jet salió de esa misma instalación aeroportuaria rumbo a Beirut.
Para complicar más el caso, un grupo de abogados libaneses anunció este jueves la presentación de una demanda contra Ghosn porque visitó en 2008 Israel.
"Tener relaciones con Israel no es tema opinable, la ley prohíbe cualquier normalización" con el país vecino, con el que Líbano se encuentra aun técnicamente en guerra, explicó Hasan Bazzi, uno de los tres abogados que presentó la demanda ante la fiscalía general.
Francia indicó por su parte que Ghosn no será extraditado si pisa territorio francés porque el país "nunca" extradita a sus ciudadanos, según la secretaria de Estado de Economía, Agnès Pannier-Runacher, en declaraciones a la cadena BFMTV.
Por otra parte una fuente cercana al caso confirmó el jueves que Ghosn no tenía uno sino dos pasaportes franceses, y que uno de ellos lo llevaba consigo.
Según la fuente consultada por la AFP, sus abogados tenían tres pasaportes de Ghosn (francés, libanés y brasileño) guardados en una caja fuerte.
Sin embargo, el exdirectivo obtuvo una autorización excepcional de un tribunal para llevar consigo un segundo pasaporte francés, que llevaba dentro de una especie de estuche con un código secreto que tenían sus abogados.
Ghosn tenía prohibido salir al extranjero pero se movía con relativa libertad dentro de Japón, donde podía salir de la capital con algunas restricciones, un sistema que se aplica a otras personas extranjeras en detención provisional, según la fuente.
De acuerdo con una fuente de la presidencia libanesa, Ghosn entró en el país procedente de Turquía con un pasaporte francés y un documento de identidad libanés.
Tras su detención Ghosn había sido cesado como presidente de Nissan y Mitsubishi Motors. Luego dimitió de la presidencia de Renault, antes incluso de que se llevaran a cabo otras investigaciones contra él en Francia.