Tras conocerse que el COVID-19 se extendió por todo Estados Unidos, el mandatario ordenó bloqueo de fronteras, más tapabocas y provisión de medicinas.
El presidente Donald Trump afianza sus acciones excepcionales. Cerró la frontera con Canadá para viajes no esenciales, invocó una ley de defensa nacional para aumentar la producción de mascarillas y, entre otros requerimientos médicos, enviará dos barcos militares cargados de equipos Nueva York. También invocará una acción ejecutiva para bloquear el ingreso por la frontera sur con México a inmigrantes que busquen asilo.
"No es cerrarla, no la voy a cerrar, pero sí vamos a invocar una serie de provisiones que nos van a permitir actuar mejor", manifestó el mandatario.
Su Departamento de Defensa también le proporcionará cinco millones de tapabocas a los hospitales.
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Estos anuncios se dan al tiempo que la lista de ciudades en cuarentena se engrosa. A los siete millones de personas en aislamiento en California, se suman las medidas en Las Vegas, cuyos casinos y hoteles se han visto forzados a cerrar. La ciudad de Nueva York podría entrar en cuarentena también.
El paro, según estimaciones del Departamento del Tesoro, podría propiciar una cifra de desempleo del 20 %.
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En América, Estados Unidos es el país con más afectados por el coronavirus: 114 muertos y 6.400 contagiados.