Entre Savia Salud, Coomeva EPS y Medimás, según la IPS, le adeudan 330 mil millones de pesos.
El desangre, sumado a la poca demanda de pacientes, tiene como enfermo terminal a uno de los principales centros hospitalarios de Medellín.
“Algunas EPS no están cumpliendo con las órdenes que ha dado el Gobierno Nacional de mantener el flujo de los recursos, pero fuera de eso los dineros de punto final se están demorando demasiado. A julio, nosotros no vamos a poder estar abiertos para poder ver cuando llegan esos recursos”, advirtió la doctora Martha Cecilia Ramírez, directora general de la IPS Universitaria.
La clínica podría cerrarse y, a su vez, Medellín podría perder 110 camas en el nivel de urgencias, necesarias para la atención de nuevos casos de coronavirus.
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“Eso profundiza más la crisis social que tiene el país y que tiene específicamente Antioquia con ocasión de la pandemia”, lamentó la directora.
Los 3.500 empleados de la IPS Universitaria están a la espera del pago de sus nóminas y amenazan con parar. La clínica se vería obligada a cerrar sus puertas.
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