“Se me llevaron todo lo que había hecho en 25 años de trabajo honesto”, dice el administrador de la casa de cambio, a quien sometieron junto a su nuera y nieta.
Los momentos que antecedieron al tiroteo en el que resultó herida la valiente patrullera Íngrid Jaramillo el pasado 23 de marzo, en el centro de Bogotá, fueron de horror.
Un adulto mayor, una mujer y una menor de edad se convirtieron en las víctimas de cuatro violentos ladrones que se llevaron 250 millones de pesos.
"Ellos traían unos zunchos de plástico y empezaron a amarrarme y a ponerme en las manos y en los pies y de todo (...) y como yo seguía gritando 'por favor, por favor, hermano, tranquilos, llévense todo, no me vayan a matar’ porque el tipo no me quitaba el arma de la cabeza", recuerda una de las víctimas.
Pero el verdadero drama para este hombre comenzó cuando llegó su nieta, de seis años.
Decía "no, mi bebé no. Karen (su cuñada) no entre, Karen no entre, pero no me alcanzó a escuchar, porque no hablaba bien por la cinta que tenía toda en la cara", relata.
Y Karen recuerda: "cuando abro la segunda puerta, mi suegro me alcanza a gritar ‘Karen no entres’, y ahí es donde los dos tipos me entran a mí y a la niña y nos amordazan con zunchos y mi hija empieza a gritar 'abuelo, abuelo’, y la amarran y le colocan cinta en la boca".
Los delincuentes nunca se compadecieron de la menor.
“La vieja ahí mismo dijo: 'tápenle la jeta a esa cagona que yo no sé qué'. Entonces le enrollaron cinta y la niña se orinó", dice con angustia e indignación.
Agrega: "cogió y me amordazó a la niña bruscamente, porque fue de una forma horrible, que hasta yo le decía: 'déjala quieta, es una niña, no te das cuenta que es una niña de seis años'".
Después de la tortura, los ladrones lograron su objetivo: escaparon y, en ese momento, se enfrenaron a tiros con la patrullera Jaramillo. (Vea acá el video del tiroteo)
"Yo les pido es que haya justicia, la verdad ellos se me llevaron todo, todo, todo lo que yo había hecho en 25 años de trabajo honesto”, concluye el hombre, en medio del llanto.
Dos de los delincuentes fueron judicializados y asegurados en las últimas horas. Se trata de Janeth Muñoz Ortega y Juan David Rojas Correa, quien ya tenía una condena y permanecía con libertad condicional.
¡Tras de cotudos con paperas! Groserísimos resultaron los sujetos...
Updated: abril 19, 2018 03:22 p. m.