Dice que duró 12 horas deambulando por Bogotá y solo recuerda que “atrás (en el articulado) iban unos muchachos”.
La joven, de 20 años, enseña las lesiones que tiene en su cuerpo y sostiene que son producto del ataque que recibió la noche del pasado martes tras subirse a un bus de Transmilenio.
Luego de andar extraviada por varias horas, afirma que se encontró con una amiga en el barrio Restrepo.
“Le dije que me revisara el cuerpo. Cuando lo hizo tenía morados en la espalda, morados en las piernas, morados en los brazos”, cuenta.
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Entonces, su amiga la acompañó a un centro asistencial donde los médicos llamaron a la Policía y le comunicaron a la joven lo ocurrido.
“(Me dicen) que fui abusada, me mandan la respectivas drogas y tratamiento que tengo que hacer”, precisa.
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A través de un comunicado, Transmilenio lamentó lo ocurrido y expresó su solidaridad tanto con la joven, como con la familia.