“El alcalde no se ha dado cuenta que Bogotá no es una ciudad de ricos”, criticó el concejal Juan Carlos Flórez. Conductores también expresaron sus dudas.
La ubicación exacta de estos peajes sería la siguiente: uno en la autopista Norte con calle 190, un segundo en la calle 13 y el tercero en la salida de Bogotá hacia el sur por la avenida Boyacá que conduce hacia la vía Villavicencio.
En esta última ubicación vive muy cerca Over Saavedra, quien critica la propuesta. “Hay un peaje nada más aquí saliendo y ahora van a colocar tres, cuatro peajes… se vuelve un negocio”, dijo.
“Ya las vías están reventadas, imagínese cómo será el carril, será imposible la movilidad”, afirmó por su parte el concejal Flórez.
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Los conductores también mostraron sus dudas. “Van a decir que un carril rápido y uno lento, pero aquí la mayoría van es de afán”, opinó Arturo Rojas.
Otros, como Luis Alberto García, creen que podría ser viable “siempre y cuando sea ágil el carril que toque pagar”.
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Para Fernando Rojas, experto en movilidad, los peajes urbanos son una buena estrategia siempre y cuando estén articulados con un proyecto amplio para mejorar la movilidad de toda la ciudad.
“Si lo que el alcalde quiere hacer es mejorar el ingreso a la ciudad, va a hacerlo para quien tiene plata, pero quien no tiene plata va a seguir padeciendo trancones y vías en mal estado”, dijo Rojas.
En la propuesta del Distrito también está implementar estos peajes urbanos en vías nuevas de la ciudad, como la Avenida Longitudinal de Occidente.