Tocaron las partes íntimas de sus nueve víctimas para cerciorarse de que no tenían objetos de valor escondidos. Dos de los delincuentes fueron capturados.
Según las mujeres, quienes cometieron el hurto y el abuso ni siquiera corrieron cuando se bajaron, actitud que sirvió para que la Policía actuara.
Uno de los individuos alcanzó a escapar con el botín.