Así lo consideró la Sala de Casación Laboral luego de determinar que los trabajadores oficiales fueron echados en el marco de “un conflicto colectivo”.
El magistrado Roberto Echeverri Bueno argumentó al respecto para tomar esta decisión que la Fábrica de Licores de Antioquia (FLA) estuvo clasificada mal, como una simple dependencia administrativa, lo que supone que sus servidores sean tratados como empleados públicos, cuando en realidad son trabajadores oficiales.
El fallo ampara a los 31 empleados que fueron despedidos entre el 17 y 28 de diciembre de 2001.
En palabras de la Corte, “…desconocer reglas básicas sobre la estructura de la administración pública, a partir de una catalogación arbitraria de sus entidades, que niegue manifiestamente su real naturaleza y misión”.
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Y añade el fallo que “…resulta por completo inaceptable que el derecho de los trabajadores oficiales a la negociación colectiva, que hace parte fundamental de la libertad sindical, se vea comprometido por el simple artificio de la administración en la clasificación y definición de sus entidades”.
Fue así como se determinó que los 31 empleados fueron despedidos sin justa causa y deberán ser reintegrandos a sus labores de inmediato.
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El fallo plantea también:
Los reclamantes son:
Este es el documento completo:
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Foto: archivo.